Seguridad física de la subestación

La protección física en las subestaciones de transmisión y distribución puede ser un factor significativo para minimizar o disuadir varios tipos de amenazas.

Los ataques a las subestaciones y a otra infraestructura de servicios públicos crítica están aumentando en frecuencia y tienen el potencial de costar a la empresa de servicios públicos cientos de miles de dólares en pérdidas financieras, provocar daños a los equipos, robo de materiales o equipos, y/o cortes de energía.

Las alertas y el monitoreo centralizado las 24 horas ofrecen una conciencia y visibilidad tempranas de los problemas que permiten que la empresa de servicios públicos responda. La seguridad física requiere una red de comunicaciones confiable, segura y de alto rendimiento entre dispositivos de seguridad (sensores, cámaras, teclados, luces, etc.) y computadoras ubicadas en el centro de operaciones de la empresa de servicios públicos.

Agregar comunicaciones de red a las subestaciones existentes para extender el alcance a los diversos dispositivos de seguridad alrededor del patio a menudo es física o financieramente prohibitivo. Las redes inalámbricas suelen ser la solución más rentable para subestaciones existentes puesto que no requieren zanjado. Algunas de las aplicaciones de seguridad física que se utilizan comúnmente son las cámaras de videovigilancia; el control de acceso mediante biometría, teclados, etc.; los sensores perimetrales que detectan la temperatura/el movimiento; y la detección, alerta e identificación de ubicación de disparos.